En Colectiva 9 gramos creemos en el arte como uno de los medio para alcanzar el autoconocimiento. A partir de esta premisa generamos empatía con el mundo. A su vez, al desarrollar procesos de autoconciencia, desarrollamos mejores relaciones de carácter cultural y social, muchas de las cuales tienen una particular relevancia en la subjetividad de las mujeres.

 

Vinculamos la visceralidad, lo que se lleva en las entrañas, en las raíces (conocimiento ancestral) con lo irracional, lo incontrolable, aquello que se ha asociado con lo femenino, directamente con la personalidad “innata” de la mujer.  Desde esta perspectiva, podemos decir que las faltas en contra de nuestra propia naturaleza son innumerables, especialmente las limitaciones ejercidas a la esencia femenina, o mejor dicho, a lo relacionado con la sensibilidad, lo pasional, lo visceral, y con ello con a la energía creadora. 

 

Como artistas, como mujeres, como miembros activos de una sociedad específica, consideramos que es importante visibilizar aquello que nos hace pasionales e irracionales; reflexionar sobre lo que se niega y oculta… y no sólo visibilizarlo, sino resignificarlo, valorarlo y reconocer sus virtudes. 

 

En nuestro primer proyecto Lo pequeño desconocido, fusionamos el circo, la danza y el teatro como interdisciplina, pues hemos encontrado vías para integrarlos y hacerlos un lenguaje articulado mediante diversas técnicas corporales y expresivas. La danza es el lenguaje en común, en dirección hacia el teatro usando los objetos simbólicamente y su relación con el cuerpo, así como la utilización de textos; el circo es el elemento que activa la tensión y la distensión, y representa el deseo por el vacío, la provocación de la caída y la búsqueda de lo desconocido. 

 

El uso de dispositivos escenográficos como cuerdas de algodón, trenzadas e hiladas a los cabellos de las intérpretes, y la interacción con la acrobacia aérea son herramientas utilizadas como una analogía de la conducta humana. El guión está construido e inspirado en elementos del tarot, en el que hemos encontrado un significativo simbolismo del inconsciente humano. Nos apoyamos en los significados de los arquetipos que describen los roles de la energía femenina y masculina en nuestro comportamiento irracional.  Así mismo, nos hemos inspirado en el mito griego de Las Moiras, encargadas de tejer el hilo por el que se rige el destino humano, que representan la invisibilidad del trabajo femenino. También hemos tomado como referencia la creencia de los pueblos indígenas quechuas, de que nuestro cabello representa la extensión física de nuestros pensamientos y el estado espiritual del individuo; cada uno de nuestros cabellos nos representa a nosotros mismos y es un punto de conexión fuerte tanto de nuestro cuerpo como de nuestro espíritu.

​

​

                                                                                   Dossier de Lo pequeño desconocido